Hay cuatro pasos fundamentales a través de hábitos saludables en tu rutina alimentaria:
1. MASTICAR CORRECTAMENTE: El proceso digestivo comienza en la boca, por lo que masticar bien no solo ayuda al proceso mecánico de digestión sino que permite que la ptialina, enzima que se encuentra en la saliva y que digiere los carbohidratos, actúe correctamente. Los alimentos sólidos deben ser masticados hasta obtener líquidos, o sea aproximadamente 30 veces.
2. PORCIONES CON MODERACION De este modo no sobrecargamos el intestino, evitando que el mismo se irrite e inflame. Debemos evitar comidas demasiado frecuentes y las porciones deben ser pequeñas.
3. RESPETAR COMBINACIONES: La combinación apropiada de los alimentos ayuda a digerirlos completamente y a evitar su descomposición. Las proteínas necesitan jugos digestivos ácidos (ácido clorhídrico pepsina, tripsina) para su digestión. Los carbohidratos necesitan jugos digestivos alcalinos (ptialina, amilasa). De lo contrario se neutralizan, hacen que la comida no se digiera correctamente y empieza la putrefacción de las proteínas y la fermentación de los carbohidratos, causando toxemia, irritación, malestar, inflamación. La sugerencia es:
– FRUTAS: comerlas solas con el estómago vacío y combinar poco. Las frutas necesitan digerirse y absorberse rápidamente.
– PROTEÍNAS (carnes, huevos, fiambres, legumbres): combinarlas con verduras con bajo contenido de almidón (lechuga, brócoli, repollo, apio, pepino, espinaca, zuccinis, – – CARBOHIDRATOS (harinas, granos, cereales): combinarlos con verduras
4. CONSUMIR ALIMENTOS DE BUENA CALIDAD que aporten vitaminas, minerales, proteínas, enzimas y fitonutrientes. Para esto, debemos aumentar el consumo de frutas y verduras, fuente ideal de todos los nutrientes necesarios. Consumirlas frescas y crudas, ya que con la cocción se destruye parte de proteínas, vitaminas y minerales. Debemos asegurarnos que en cada comida existan alimentos frescos y crudos. Las ensaladas no deberán faltar en nuestra mesa, acompañando todas las comidas.
A la hora de ingerir los alimentos debemos hacerlo en la mesa, sentados, tranquilos, evitando situaciones de estres, además de ser éste un momento de encuentro familiar.
Liz Zarlenga