La alimentación es fundamental para tener buena salud y para el cuidado de tu piel. El tejido cutáneo nos avisa sobre alteraciones que puede sufrir nuestro organismo por falta de nutrientes. Nuestra piel, refleja las carencias de vitaminas, proteínas y minerales, por lo que debemos optar por una dieta equilibrada donde abunden frutas y verduras.
La piel está constituida por dos capas, la dermis y la epidermis. Recibe los nutrientes que necesita a través de la sangre.
Para mantenerse en buen estado y no envejecer, requiere especialmente de ácidos grasos proteínas, vitaminas A, C y B y carotenos y agua.
La falta de estos nutrientes produce un aumento en la proliferación de células de la piel, con pérdida de agua.
Con el paso de los años se produce una disminución de la elasticidad y aumento de arrugas y nuestra piel se vuelve más seca.
ESTRATEGIAS PARA COMBATIR EL ENVEJECIMIENTO
- Consumo diario de frutas y verduras con Vitamina C, imprescindible para la formación de colágeno
- Aceite de oliva, por su aporte de ácidos grasos Omega
- Pescados blancos y azules (atún, sardinas, salmón, lubina, pez espada…)
- Zanahorias
- Consumir diariamente 2 litros de agua pura, para mantener una buena hidratación.
- Evitar realizar dietas desequilibradas que pueden llevar a un déficit calórico en la dieta, llevando al envejecimiento de nuestra piel
- Dormir las horas suficientes para descansar bien y favorecer así el proceso de regeneración celular de la piel.
- Incorporar o mantener hábitos saludables como: no fumar, no consumir alcohol
- Vive la vida con alegría y disfruta sanamente. El estrés y depresión influye negativamente en la respuesta inmunológica de la piel, reduciendo la función de barrera, dando lugar al envejecimiento y aparición de arrugas.
QUE EL CUIDADO DE TU PIEL, COMIENCE DESDE TU INTERIOR