600x0_605743

Muchos son los factores que influyen a la hora de elegir un alimento. Principalmente influyen hábitos que adquirimos en nuestra infancia a partir de comportamientos repetitivos en el seno familiar,  costumbres, religión.

Te propongo cambiar tus hábitos alimentarios en estas vacaciones, con el fin de adoptar un estilo de  vida saludable y prevenir enfermedades derivadas de una mala alimentación .

Estos cambios se inician desde el simple hecho de ir al supermercado donde debemos elegir alimentos  saludables, y luego en el hogar, donde elegimos el menú, método de cocción y tamaño de las porciones.

Realizar un Plan Alimentario Saludable, no significa que nuestra alimentación sea monótona o aburrida; muy por el contrario, a partir de nuestros gustos y preferencias debemos elaborar un plan alimentario que cubra los requerimientos nutricionales que necesita el organismo.

  Te cuento 10 consejos útiles que podes comenzar a realizar

  • Desayuna todos los días, preferentemente en casa antes de salir
  • No vayas al supermercado con el estómago vacío: evitarás tentaciones
  • Lleva una lista de los alimentos necesarios y de bajas calorías
  • Consume todos los días frutas y verduras
  • Come en forma equilibrada, reduciendo cantidades y nunca repitas tu plato
  • No lleves la fuente con comida a la mesa ni prepares comida de más
  • No saltees comidas ni hagas ayunos
  • Toma 2 litros de agua pura por día en períodos de tiempo separados
  • Realiza  ejercicio físico y/o camina
  • No esperes al lunes y comienza  ahora mismo

COMO COMBINAR LOS ALIMENTOS:

Realiza 5 comidas diarias: Desayuno, Media Mañana, Almuerzo, Merienda y Cena.

Cada una de ellas deberá contener una cuota proteica: queso, cereales, pollo, pescado, huevo, etc (esto te producirá saciedad), acompañándolo siempre con vegetales de todos los colores, preferentemente crudos, y condiméntalo con aceite de oliva (una cucharada de postre,  de esta manera no añadirás  más aceite del necesario)

ACLARACIÓN: el ejemplo sugerido se realizará en casos que no existan patologías de base: diabetes, hipertensión arterial, insuficiencia renal, entre otras.

“Para cambiar un hábito adquirido y mantenernos en buen estado de salud o para  bajar de peso y mantenerlo, es esencial que esos cambios sean sostenidos en el tiempo”

¿TE ANIMAS A COMENZAR EL  CAMBIO?

 LIZ ZARLENGA

Nutricionista